Gracias Yasmina de hace unas horas, por los cuidados que me das.
Cuando lavaste los platos al anochecer y la cocina amaneció limpia.
Cuando fuiste a dormir con los dientes cepillados y me desperté sin la boca pastosa.
Cuando volví agotada de estar fuera todo el día y la tarde anterior ya habías doblado la ropa.
Cuando me despierte y ya hayas escrito este texto y no tenga ninguno acumulado.